En educación como en nuestra vida personal y profesional no podemos prescindir de ilusión y pasión, y más quizá en el mundo actual en el que los valores están cambiando y nos movemos en futuros inciertos.
Por ello el equipo docente reflexiona, dialoga y escucha con el fin de diseñar la escuela que queremos, y pensamos en una escuela que...
- ofrece contextos de aprendizaje donde los niños se sienten felices.
- comparte y colabora en diferentes propuestas.
- confía en el potencial de sus alumnos.
- construye conocimiento colectivo.
- respeta el mundo emocional y creativo del alumno.
- reúne la inteligencia de la comunidad educativa para resolver con la participación, y actitud de colaboración los problemas diarios.
POR TODO ELLO Y SIN DEJAR DE SOÑAR CON "UTOPÍAS POSIBLES", COMENZAMOS EL NUEVO CURSO.